¿Cuanto te pagaran para renunciar a tus sueños?. Motivación extrínseca vs intrínseca

Esta semana continuo con sesiones en tres talleres sobre liderazgo que llevo impartiendo desde hace ya varios semanas. Da la casualidad que en los tres talleres me toca hablar sobre motivación, como conseguir incrementar el compromiso de nuestros colaboradores.  Me gusta empezar este tema indicando que no es lo mismo un trabajador satisfecho que uno comprometido, para después centrarme en como conseguir este nivel de compromiso esperado(si quieres más información sobre este asunto te invito a que leas mi anterior artículo “El talento se compromete”).

Es importante este punto porque una empresa es, entre otras cosas, un conjunto de compromiso compartidos. El éxito de un negocio va a depender en gran medida de este indicador muy por encima de cualquier otro. Estamos ante un tema vital para las organizaciones y sus lideres quienes, en las alturas en la que estamos y con la escasez de talento que se avecina en todos los sectores, deben replantearse su manera de motivar al equipo.

Para explicar brevemente cual es desde mi punto de vista la clave del compromiso y donde deben poner el foco las empresas para comprometer al talento, me gustaría que vieras el vídeo que he recogido más abajo sobre la interesantísima pelicula “Up in the air” del 2009.

¿Cuánto te pagaron por renunciar a tus sueños?. ¡Vaya pregunta!. Yo soy el primero que reconozco la importancia del dinero en nuestra sociedad y su valor motivacional. Negarlo es cosa de locos, de personas que tiene tanto que no les hace falta, o quien tiene tan poco que desean restarle importancia. La motivación extrínseca, es decir, realizar  una tarea para obtener un recompensa es importantísima. Sin embargo debe existir algo más, existe algo más que es la clave para alcanzar el ansiado compromiso de nuestros colaboradores. La motivación intrínseca.

Hacer un trabajo, desempeñar unas funciones donde el mismo hecho de su realización te genere satisfacción, eso es la motivación intrínseca. Claro que debe haber unas condiciones mínimas de trabajo (horario, salario, tiempo libre,…), pero lo que marca la diferencia es la capacidad que tienen las empresa para generar un estado en el que el venir a trabajar provoque emociones positivas.  De esta forma se consigue dar un salta cualitativo en la motivación del equipo, consiguiendo además crear un entorno donde se atraiga y retenga al talento. Recuerda que el talento atrae al talento.

Como le pregunta Clooney a J.K. Simmons en el fragmento de la película que hemos visto, ¿cuánto te pagaron por renunciar a tus sueños?  ¿cuánto salario te pagaron para olvidar la motivación intrínseca y quedarte solo con la  extrínseca?.

Gracias por tu tiempo, lo más valioso que tienes, y no olvides …¡desarrollar tu talento y el de tu equipo!