Si, así es, los malos líderes no existen. Antes de que me contestes hablándome de ese jefe tuyo que sufriste (o sufres) y que ocupa el primer puesto en tu ranking de malos líderes, déjame que me explique. Decir que no existen personas que ejerzan un liderazgo inadecuado es como afirmar que no hay gente que haga cosas malas en este mundo. Los hay al igual que lo contrario, esto es, profesionales que destacan por su excelencia en la dirección de personas. Sin embargo, creo que más que malos liderazgos existen grandes debilidades, áreas de mejora identificadas (o no) por la persona que producen resultados catastróficos sobre el negocio y la motivación de las personas
Desde este punto de vista el acercamiento hacia el crecimiento directivo debe verse como algo positivo y recuperable. Podemos aprender a ser mejores líderes si adquirimos los hábitos adecuados y mejoramos las debilidades encontradas. Nada de de planteamientos derrotistas que defienden posturas inmovilistas. Todo lo contrario, cualquiera que quiera desarrollar su talento directivo puede alcanzar esta meta si identifica dichas debilidades, fija un objetivo y es constante en su aprendizaje.
Como en todo ámbito de la vida, casi cualquier competencia puede ser mejorada con trabajo y esfuerzo, no buscando ser los números 1 en esas habilidades, pero si sintiendo que estoy mejorando. Como dice el gran Denzel Washington en la pelicula The equalizar (El protector)…
“Progreso, no perfección”
Gracias por tu tiempo, lo más valioso que tienes, y no olvides …¡desarrollar tu talento y el de tu equipo!
