Cuando trabajo el desarrollo directivo con líderes y gestores/as de empresa, me gusta utilizar ejemplos que procedan de ámbitos muy diversos ya que pienso que el mensaje llega mejor y de manera más completa. En una empresa me plantearon el reto de analizar y comparar el liderazgo de dos mega estrellas del deporte de la canasta: Michael Jordan por un lado, y LeBron James por otro. Este desafío vino en parte motivado por dos acontecimientos que se produjeron en el 2020: el estreno en la plataforma NETFLIX del documental The Last Dance que analiza la última temporada de Jordan con los Chicago Bulls en la que ganó su sexto anillo, y la consecución del cuarto título de la NBA por parte de LeBron James con Los Ángeles Lakers.
Como me gustan este tipo de retos donde se vincula deporte y empresa, he decido analizar brevemente los estilos de liderazgo de estas de estas dos grandes figuras del deporte con el objetivo de aprender del éxito cosechado desde dos maneras muy diferentes de entender la gestión de equipos. No es mi intención dilucidar el debate sobre quien es mejor de los dos en este campo, aunque al final del artículo os daré mi opinión. Es cierto que el documental ha ampliado la visión que se tenía de Jordan y en muchos casos no ha salido bien parado. Es posible que cuando LeBron se retire y alguien realice uno parecido sobre su vida, nos haga cambiar la imagen que tenemos de él. Pero hasta ese momento, he utilizado la información de la disponemos la mayoría de nosotros. Por último y en el momento que escribo este post, LeBron sigue en activo en uno de los mejores momentos de su carrera, es muy probable que todavía no haya completado su palmarés y en los próximos años añada algún hito más a su ya de por sí exitosa carrera.
Cuando Michael aterrizó en los Bulls en 1984 no era un equipo competitivo, todavía no había ganado ningún título. Fue su llegada la que lo cambió todo, tanto en la franquicia como en la NBA. Obtuvo 6 anillos, 5 MVP´s y llego a anotar en toda su carrera más de 32.000 puntos. Con un carácter competitivo y dominante, hacia gala constantemente de un liderazgo muy autoritario. El clima de tensión que provocaba conseguía que sus compañeros dieran el máximo en cada entrenamiento y partido, pero también causó la salida del equipo de muchos otros que fueron incapaces de trabajar en un entorno con una presión continua que llegaba a ser insoportable. El caso de Pippen, quien se mantuvo a su lado tantos años, fue una excepción. En el documental se le define como alguien con una personalidad muy complaciente, a veces sumisa, que se encontraba muy cómodo en ese rol de secundario al que se le relegaba cada temporada. Jordan adoraba el protagonismo y los focos, él quería ser el centro de atención y lo consiguió, vaya si lo hizo.
Nadie puede poner en cuestión la capacidad de trabajo de Jordan, entrenaba más que nadie y siempre daba el 100% en cada encuentro. Lideraba con el ejemplo, especialmente en defensa que es donde a veces cuesta más.
La calidad de LeBron también es indiscutible. No fue el primero, antes lo hicieron muchos otros, aunque en estadísticas no se queda muy atrás. 4 anillos, 4 MVP´s y hasta la fecha más de 34.000 puntos. A diferencia de Jordan, ha sido capaz de triunfar en varios equipos diferentes, Miami, Cleveland y ahora Lakers, lo que refleja su gran capacidad para adaptarse a diferentes culturas. ¿Jordan habría conseguido lo mismo en otro equipo? ¿con otros compañeros y entrenador?. El liderazgo de James es más participativo, intenta involucrar al resto de compañeros, los hace sentir importantes y cuida las relaciones. Sabe cuando es el momento de asumir más responsabilidad (en las finales), y cuando debe empoderar al resto del equipo (temporada regular). Le interesan más las personas que le rodean y el objetivo colectivo frente a los hitos individuales. Claro que es muy ambicioso y competitivo, pero todo parece indicar que pone al mismo nivel los objetivos colectivos y los personales.
Como me apuntó un amigo, no hay una única forma de ser líder, esta categoría se atribuye a aquellas personas que consiguen sacar lo mejor de las personas que le rodean, la clave está en saber que necesita el equipo en cada momento. Ambos lo han conseguido y seguramente ejercieron un liderazgo que, siendo diferente, se ha mostrado altamente eficaz.
A pesar de todo creo que LeBron ha sido, y es, un líder más completo, refleja una manera de dirección más actual en la que sin perder nunca de vista el objetivo impulsa el desempeño del resto de quienes le acompañan. Un liderazgo que cuida las relaciones y en donde lo colectivo es más importante que lo individual. Como otro buen amigo me indicó, con LeBron el éxito tiene más posibilidades de llegar
Por cierto, en este análisis me han ayudado los compañeros del equipo de basket en el que juego, la mayoría de lo que aparece aquí son sus aportaciones así que …¡muchas gracias y espero que pronto nos volvamos a ver en la cancha!.
Gracias por tu tiempo, lo más valioso que tienes, y no olvides … desarrollar tu talento y el de tu equipo
